Buki el Maestro arquitecto, Toreador (724 a.C.)



 
Buki, Toreador

Vida humana
Tres décadas después todos y cada uno de los cinco portadores del Arca, que formaron el consejo de Maestros del Rey David tuvieron descendencia.

Los primogénitos de estos fueron los elegidos para continuar con la labor de formar un consejo del Rey. Sus padres eran unos héroes y ellos habían sido educados y enseñados por maestros de buena posición. Ahora los cinco son Maestros del Consejo del Rey Salomón, segundo hijo de David, ya que su primogénito murió antes de poder reinar.

Hijo del gran herrero Gabriel, le intentó enseñar el arte familiar del yunque y el martillo pero pronto el joven se dio cuenta de que tenía un talento para diseñar, más que para fabricar. Su padre le apoyó y gracias a su influencia y recursos Gabriel tuvo los mejores Maestros y llegó a ser Maestro arquitecto de Jerusalén.

Tiene un serio problema con la bebida y siempre que bebe le sienta fatal, pero tiene el hábito de crear en estado ebrio por que cuando está bebido es capaz de ver sucesos que aun no han ocurrido. Al principio no hacía caso a estas visiones etílicas pero una noche borracho vio como era sepultado por un desprendimiento en una obra de su responsabilidad en la que se encontraba, y decidió irse del lugar como alma que lleva el diablo, el desprendimiento ocurrió y en lugar de sepultarle y matarlo lo dejó tullido de una cojera para toda su vida, un pequeño precio a pagar por su vida. Hace poco se enteró que su padre Gabriel también tenía estas visiones y las atribuyó a que Yahweh hablaba con él.

Actualmente Buki está al mando de los proyectos de construcción de los templos y edificios más importantes de la ciudad.

Tres décadas después los primogénitos de los portadores del Arca son sabios y experimentados maestros que fueron consejeros del Rey Salomón y ahora de su descendiente el impopular Rey Roboam.

El consejo de Roboam ha terminado con éxito la difícil tarea de Salomón, la construcción del Templo de Jerusalén, donde ahora se guarda el Arca de la Alianza, segura en lo más profundo de la construcción.

Tras terminar el Templo de Salomón todo fue cuesta abajo, una vez estuvo al mando de los proyectos de construcción de los templos y edificios más importantes de la ciudad y ahora ahoga sus penas en alcohol. Todos los que le importan lo han apartado de su vida y le odian, Yahweh lo ha abandonado, ya nadie le quiere, únicamente su amiga incondicional la bebida, ella es la única que nunca le falla.

Tres décadas después los primogénitos de los portadores del Arca son sabios y experimentados maestros que fueron consejeros del Rey Salomón y ahora de su descendiente el impopular Rey Roboam. El consejo de Roboam ha terminado con éxito la difícil tarea de Salomón, la construcción del Templo de Jerusalén, donde ahora se guarda el Arca de la Alianza, segura en lo más profundo de la construcción.

Buki, maestro arquitecto, solo, desahuciado y hundido en la miseria, ahoga sus penas en alcohol recordando tiempos mejores. 

El Rey Roboam de Jerusalén, aconsejado por sus consejeros más jóvenes decidió enviar a su embajador y a los Maestros más sabios y viejos de su consejo a pactar con los Israelitas.

Cuando el consejo se encontró con los Israelitas en sus tierras con su líder estaba Elsh, en Maestro Artesano, Elsh era ahora consejero de los Isrealitas como represalia a su éxito de Jerusalén.

El consejo fue encarcelado y por la noche un asesino visitó sus celdas matándolos uno a en el silencio de la fría noche. Murieron desangrados con su garganta cortada por el filo de este asesino enviado por Elsh que cumplía así su venganza para poder regresar a su amada Jerusalén. Mató a todos los consejeros excepto a Herodes el maestro esclavista y a Samael el embajador, que se encontraban juntos esperando la amenaza. Mordisquitos, el dientes de sable de Samael defendió valientemente a  su amo arrancando la cabeza de un mordisco al asesino, que misteriosamente cuando el cuerpo decapitado cayó al suelo comenzó a degradarse hasta que se convirtió en cenizas al viento. Samael y Herodes huyeron para ser capturados y lapidados por el ejército Israelí como mensaje al Rey Roboam.

Por la decisión de Roboam de subir los impuestos  los israelitas del norte se sublevaron ante los Judaitas de Jerusalén y tras amenazar a Israel y al Rey Roboam, el recién creado ejército israelí mató a su consejo enviado para mediar y lapidó a su embajador y a uno de sus maestros consejeros hasta matarlos, después amenazó con seguir adelante y entrar en guerra con Judá.

La división del una vez unificado territorio en dos naciones más pequeñas hizo a ambas más vulnerables a los ataques del exterior. En el quinto año de reinado de Roboam, se produjo la invasión del Jerusalén por el faraón Sheshonq I.


Abrazo y no-vida
Al fin todas las penas han muerto con su vida humana y el Maestro Elsh, el mismo que planeó la muerte de Buki y de sus compañeros, había decidido abrazarle y otorgarle el regalo de la vida eterna, ya que Buki era el Arquitecto del Templo de Salomón una verdadera Maravilla de la época y obra maestra arquitectónica.

Durante décadas fue instruido por su Sire en las artes de los mejores maestros de Jerusalén al igual que en las artes vampíricas como las Disciplinas del clan. Su instrucción fue atenta y meticulosa por parte de Elsh, y Buki demostró una concentración fuera de lo común para su estudio. Mientras era instruido por su Sire, Buki se dio cuenta que este no era alguien tan odioso como había deducido tras su asesinato orquestado por su padre y maestro vampírico.

Yahveh, sigue hablando con él cuando se embriaga con la sangre de humanos borrachos, y en sus conversaciones con Dios

Ahora Buki puede disfrutar de la no-vida, comenzar proyectos a largo plazo antes imposibles en su cabeza humana, construir lo que desee donde desee y hacer de Jerusalén una ciudad monumental.

Rodeado de comodidades, de criados y de excesos de vampiro, mujeres como ganado, dinero corrupto, sangre alcoholizada y construcciones maestras, esa era la no-vida perfecta y al fin sus días oscuros de mala fortuna habían terminado.

Buki, el Maestro Arquitecto Toreador está convencido de que Jerusalén huele a podrido y que haría falta una purga para limpiarla a fondo, cierta … plasticidad.