 |
| Samael, Ventrue |
Vida humana
Tres décadas después todos y
cada uno de los cinco portadores del Arca, que formaron el consejo de Maestros
del Rey David tuvieron descendencia.
Los primogénitos de estos
fueron los elegidos para continuar con la labor de formar un consejo del Rey.
Sus padres eran unos héroes y ellos habían sido educados y enseñados por
maestros de buena posición. Ahora los cinco son Maestros del Consejo del Rey Salomón,
segundo hijo de David, ya que su primogénito murió antes de poder reinar.
Hijo de Isaac Maestro herrero,
rompió la tradición familiar cuando decidió no ser herrero como sus
antepasados. Samael había pensado en forjar otro tipo de armas. Su padre Isaac,
siempre le apoyó y le quiso ya que era hijo único y tuvieron la desgracia de
perder a su madre en el parto. Samael no solo había roto la tradición de la
herrería, si no que al criarse en la corte del Rey David, donde su padre lo
llevó de pequeño, no había desarrollado esa maldición hereditaria llamada
tartamudez.
El joven Samael creció en la
corte y su reputación creció con él, hasta llegar a ser Embajador del Rey. Poco
a poco el cargo se le subió a la cabeza y la mayor de todas sus excentricidades
fue hacerse con una cría de tigre dientes de sable como mascota domestica al
que llamó Mordisquitos.
Como embajador se ha vuelto
totalmente paranoico y teme que le reemplacen de su acomodada posición. Todo el
mundo ve en el una apariencia inquietante y cuando tiene al dientes de sable
cerca esta crece, pero Samael es capaz de contrarrestarla con su carisma
afable.
Actualmente Samael lleva la
palabra del Rey a otros reinos y cierra acuerdos para su Rey Salomón, por el
bien de Israel, siempre acompañado por su fiel Mordisquitos.
Tres décadas después los
primogénitos de los portadores del Arca son sabios y experimentados maestros
que fueron consejeros del Rey Salomón y ahora de su descendiente el impopular
Rey Roboam.
El consejo de Roboam ha
terminado con éxito la difícil tarea de Salomón, la construcción del Templo de
Jerusalén, donde ahora se guarda el Arca de la Alianza, segura en lo más
profundo de la construcción.
Durante estos treinta años ha
adquirido una inmejorable reputación entre los embajadores de los reinos
cercanos gracias a sus logros y acuerdos para el reino de Israel. Está
convencido de que quieren matarlo y últimamente ha tenido que dar de comer a su
dientes de sable a algún embajador enemigo y a rivales molestos, nadie tiene
por que enterarse de sus métodos, o será alimento de Mordisquitos.
Tres décadas después los
primogénitos de los portadores del Arca son sabios y experimentados maestros
que fueron consejeros del Rey Salomón y ahora de su descendiente el impopular
Rey Roboam. El consejo de Roboam ha terminado con éxito la difícil tarea de
Salomón, la construcción del Templo de Jerusalén, donde ahora se guarda el Arca
de la Alianza, segura en lo más profundo de la construcción.
Samael, Embajador Real, reputado en su labor diplomática pero
la paranoia oscurece su vida cada vez más.
El Rey Roboam de Jerusalén, aconsejado por sus consejeros
más jóvenes decidió enviar a su embajador y a los Maestros más sabios y viejos
de su consejo a pactar con los Israelitas.
Cuando el consejo se encontró con los Israelitas en sus
tierras con su líder estaba Elsh, en Maestro Artesano, Elsh era ahora consejero
de los Isrealitas como represalia a su éxito de Jerusalén.
El consejo fue encarcelado y por la noche un asesino
visitó sus celdas matándolos uno a en el silencio de la fría noche. Murieron
desangrados con su garganta cortada por el filo de este asesino enviado por
Elsh que cumplía así su venganza para poder regresar a su amada Jerusalén. Mató
a todos los consejeros excepto a Herodes el maestro esclavista y a Samael el
embajador, que se encontraban juntos esperando la amenaza. Mordisquitos, el
dientes de sable de Samael defendió valientemente a su amo arrancando la cabeza de un mordisco al
asesino, que misteriosamente cuando el cuerpo decapitado cayó al suelo comenzó
a degradarse hasta que se convirtió en cenizas al viento. Samael y Herodes
huyeron para ser capturados y lapidados por el ejército Israelí como mensaje al
Rey Roboam.
Por la decisión de Roboam de subir los impuestos los israelitas del norte se sublevaron ante
los Judaitas de Jerusalén y tras amenazar a Israel y al Rey Roboam, el recién
creado ejército israelí mató a su consejo enviado para mediar y lapidó a su
embajador y a uno de sus maestros consejeros hasta matarlos, después amenazó
con seguir adelante y entrar en guerra con Judá.
La división del una vez unificado territorio en dos
naciones más pequeñas hizo a ambas más vulnerables a los ataques del exterior.
En el quinto año de reinado de Roboam, se produjo la invasión del Jerusalén por
el faraón Sheshonq I.
Abrazo y no-vida
El Sire de Samael, lo abrazó
justo cuando murió a causa de las conspiraciones del Toreador Elsh.
Samael fué el segundo
chiquillo que creaba su Sire y este tenia planes concretos para él. Lo envió a
los Reinos Asirios para aprender de sus costumbres y estrechar lazos de amistad
con los nuevos dueños del Reino de Judá.
 |
| Mordisquitos |
Samael convirtió a Mordisquitos
en su Ghoul, para que este fuese su mascota eternamente y lo acompañara en el
viaje de la no-vida, devorando de vez en cuando a algún incauto rival, o solo
impresionando a sus visitas.
Gracias a su carisma Samael
pronto se integró en el circulo vampiro del territorio Asirio. Debido a sus
constantes viajes necesarios para su labor de acercamiento en el Reino Asirio,
Samael desarrolló una habilidad especial por la que era capaz de calcular
exactamente el tiempo del que disponía para que amaneciera, muy útil para
salvar su existencia inmortal de los rayos mortales de luz solar.
Conoció a Gabriel que
había huido a Asiria por algún turbio asunto en su pasado, como Samael tenia
ambiciones para escalar en la sociedad vampirica y como hebreos ambos
comenzaron a ayudarse mutuamente.
Juntos eliminaron a un Seguidor
de Set, consejero del poder Assamita, que era en realidad un espía infiltrado
en la corte Asiria. Esto hizo que ambos se ganaran la confianza de los rivales
Assamitas Asirios. En este enfrentamiento contra el setita, una serpiente le
salió del pelo y le escupió veneno a Samael en los ojos, desde entonces perdió
el color de lo que ve y todo en su vida esta teñido de una escala de grises y
negros.
Gabriel transmite a Samael que es
hora de regresar a Jerusalén, Su Sire, en realidad su abuelo, Elsh, lo necesita y debe poner a su
disposición todos sus recursos, lo que Gabriel ignora es que Elsh mató a Samael
...